NO TE DUERMAS MIRANDO LA LUNA
Soy lo más recóndito del bosque
transfigurado en cráteres de luna
inocente
de estallidos transcendentales
que conformaron su figura.
Su sombra tan solo adormece,
es su luz la que aniquila vida
en compañía del diablo
vestido con mi cabellera dorada
como espejismo de tunica negra
sobre telas de algodón bordadas
de flores delirantes, casi muertas.
Mis calaveras serán tres
la tuya, la mía y la de la sombra
del recuerdo de nuestra mirada.
Esta noche leí en mi almohada
una bella turbación lacerada
letras que descifraron mi futuro
ser bulbo de iris resplandeciente
obsequiado por los gusanos
de mis propias calaveras.
Soy lo más recóndito del bosque
transfigurado en cráteres de luna
inocente
de estallidos transcendentales
que conformaron su figura.
Su sombra tan solo adormece,
es su luz la que aniquila vida
en compañía del diablo
vestido con mi cabellera dorada
como espejismo de tunica negra
sobre telas de algodón bordadas
de flores delirantes, casi muertas.
Mis calaveras serán tres
la tuya, la mía y la de la sombra
del recuerdo de nuestra mirada.
Esta noche leí en mi almohada
una bella turbación lacerada
letras que descifraron mi futuro
ser bulbo de iris resplandeciente
obsequiado por los gusanos
de mis propias calaveras.