En estas sombras que habito
el tiempo lo miden
los sonidos
de la noche
y el rugir de una fiera
Corazon que palpita
muy dentro
de esa roca
extraviada en medio
de la riqueza
de la selva
Verde como las copas
de los arboles
verde
como el lecho
de las hojas
que desparramadas
esperan
la espalda moribunda
Espalda de una fiera
arrojada
al vacio
que se abre
en la tierra
arrojada
por las garras
de la unica vencedora: Eva.
Por VILMA PICAPIEDRA
(Al interior de la caverna VIII, segun mi propia version)
el tiempo lo miden
los sonidos
de la noche
y el rugir de una fiera
Corazon que palpita
muy dentro
de esa roca
extraviada en medio
de la riqueza
de la selva
Verde como las copas
de los arboles
verde
como el lecho
de las hojas
que desparramadas
esperan
la espalda moribunda
Espalda de una fiera
arrojada
al vacio
que se abre
en la tierra
arrojada
por las garras
de la unica vencedora: Eva.
Por VILMA PICAPIEDRA
(Al interior de la caverna VIII, segun mi propia version)