Con pesado asombro, me envuelve
la bruma
de tu mirada;
no se si debía ser yo
la asombrada.
Entre espectaculos
no dignos
a otros ojos,
nuestros ojos
no son más
que cuatro planetas
huyendo
de la fuerza
de la nada.
Ven corazón, ven sol,
ven que yo estoy abierta
a tus rayos.
Ven que la luna
ahora se ha partido en dos
y duerme en las olas
que arriba teje el ritual de nuestros ojos.
VILMA PICAPIEDRA
Lo acabé de hacer ahora, no se cómo me quedó. Ustedes lo dirán.
la bruma
de tu mirada;
no se si debía ser yo
la asombrada.
Entre espectaculos
no dignos
a otros ojos,
nuestros ojos
no son más
que cuatro planetas
huyendo
de la fuerza
de la nada.
Ven corazón, ven sol,
ven que yo estoy abierta
a tus rayos.
Ven que la luna
ahora se ha partido en dos
y duerme en las olas
que arriba teje el ritual de nuestros ojos.
VILMA PICAPIEDRA
Lo acabé de hacer ahora, no se cómo me quedó. Ustedes lo dirán.