Cierto perro cogió entre sus dientes un gran pedazo de carne. "'¡Qué magnífico!", se dijo el incauto animal. "Lo llevaré a casa y allí lo comeré a mi regalado gusto".
En el camino cruzó un arroyuelo, cuyas cristalinas aguas reflejaron su imagen, y le hicieron ver ingenuamente a otro perro con una presa más grande en el hocico.
Como el animal tenía hambre, abrió la boca y se zambulló en el agua para coger el pedazo del otro perro. Mas, ¡oh desencanto!, se sumergió hasta el fondo y no encontró a su rival.
Entonces se dio cuenta, aunque tarde, de que su gula le había costado la pérdida de su propia presa.
Mas vale pájaro en mano que cien volando
Aquí les tarigo otra fábula (no de mi autoría), para reflexionar...
Apreciamos lo que tenemos, o lo dejamos por algo que creemos mejor...y nos damos cuenta tarde del error?
En el camino cruzó un arroyuelo, cuyas cristalinas aguas reflejaron su imagen, y le hicieron ver ingenuamente a otro perro con una presa más grande en el hocico.
Como el animal tenía hambre, abrió la boca y se zambulló en el agua para coger el pedazo del otro perro. Mas, ¡oh desencanto!, se sumergió hasta el fondo y no encontró a su rival.
Entonces se dio cuenta, aunque tarde, de que su gula le había costado la pérdida de su propia presa.
Mas vale pájaro en mano que cien volando
Aquí les tarigo otra fábula (no de mi autoría), para reflexionar...
Apreciamos lo que tenemos, o lo dejamos por algo que creemos mejor...y nos damos cuenta tarde del error?