Dibujo tierno…
Tu boca.
Sonrisa tímida atisbada entre la seda
de tu cabello blanco:
Caudal.
Caes entre mis brazos:
Niña…
Cada luna,
cada estrella,
todas las noches,
frágilmente suspendida en el mar
de cada beso,
la entregada caricia de tu ávida piel.
Amante serena:
Te miro atónito emerger en gloria
una y otra vez,
a cada segundo,
así tan linda,
Para consumar el ritual,
alquilar tiempo a los dioses,
y de nuevo,
sosegadamente ,
saciarnos de azul y noche.
Solo para tus ojos,
chiquilla,
solo para los míos.
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poema seleccionado semifinalista para la próxima edición de centro poético