La luz encendida en tu ventana
señal en morse para encontrarnos,
toques con piedras anuncian mi llegada,
pero no treparé por la pared;
como Romeo con Julieta desesperada.
Baja, abre la puerta y nos amamos,
¡que importan las lenguas parlanchinas!
no hacemos mal ni es pecado,
no hacemos daño;
¡que les importa nuestras vidas!
Resquemor con envidia se mezclan
en las populares habladurías
y todo por una falsa etiqueta
que me pusieron inmerecida.
Mas yo no soy un truhán,
ni un Don Juan, ni mujeriego
y mucho menos conquistador,
solo quiero ser el caballero;
que seduzca tu corazón.
Jesús J.J.L
señal en morse para encontrarnos,
toques con piedras anuncian mi llegada,
pero no treparé por la pared;
como Romeo con Julieta desesperada.
Baja, abre la puerta y nos amamos,
¡que importan las lenguas parlanchinas!
no hacemos mal ni es pecado,
no hacemos daño;
¡que les importa nuestras vidas!
Resquemor con envidia se mezclan
en las populares habladurías
y todo por una falsa etiqueta
que me pusieron inmerecida.
Mas yo no soy un truhán,
ni un Don Juan, ni mujeriego
y mucho menos conquistador,
solo quiero ser el caballero;
que seduzca tu corazón.
Jesús J.J.L