Como pocos, como otros, como ninguno
saltó por encima, por debajo. A tientas.
Simulando, haciendo de cuenta,
diciendo lo que todos dicen, lo que nadie.
En su mano el bolígrafo, las cuentas,
la tarjeta sube y sencillo para un café
Notó entonces esa soledad de otros,
como pocos contrajo sus labios,
pronunció entonces un te quiero
un nunca más, un te necesito.
Entonces, se apretó contra el silencio
las miradas esquivas, tonos de disculpas
y alguna canción en la orilla opuesta.
Y se dijo. Como pocos, como otros.
Es demasiado tarde para una cita
y demasiado temprano para olvidar.
saltó por encima, por debajo. A tientas.
Simulando, haciendo de cuenta,
diciendo lo que todos dicen, lo que nadie.
En su mano el bolígrafo, las cuentas,
la tarjeta sube y sencillo para un café
Notó entonces esa soledad de otros,
como pocos contrajo sus labios,
pronunció entonces un te quiero
un nunca más, un te necesito.
Entonces, se apretó contra el silencio
las miradas esquivas, tonos de disculpas
y alguna canción en la orilla opuesta.
Y se dijo. Como pocos, como otros.
Es demasiado tarde para una cita
y demasiado temprano para olvidar.