Caminaba tranquilo por el supuesto sendero que me dijeron debía seguir
De pronto los caminos se tornaron confusos y fuí encarado por viles demonios,
misteriosos espectros y suertes de zombies salidos de su tumba por viles conjuradores nigromantes que no poseen otra habilidad propia que la de invocar a los muertos,
confundido y maravillado por la revelada verdad que se presentaba ante mis ojos
me di por muerto, y me quede paralizado frente a ese supuesto sendero que debía seguir.
caray, que confusión, ahora estoy muerto, cuando o como no tengo idea.
pero seguía siendo yo mismo, así que decidí afrontarlo y me puse de pie.
entonces los demonios y hechiceros me atacaron e indefenso me quedé.
entonces elevé mis plegarias al señor y le dije: ¡ayúdame señor!
¡estoy en esta especie de infierno!
pero recordé que no creo en cielo o infierno y que la realidad es solo una,
constante lucha de opuestos en eterno equilibrio
y continué caminando por el sendero que se supone debo seguir,
aunque temblaba de temor lograba ver a la distancia
grandes montañas y un sol resplandeciente entre las nubes.
y entonces escuché mi propia voz cayendo del cielo diciendo:
por favor perdóname, nuca quise lastimarte.
pero muy tarde era por que había tomado un nuevo sendero
que no se supone es el que debía seguir
De pronto los caminos se tornaron confusos y fuí encarado por viles demonios,
misteriosos espectros y suertes de zombies salidos de su tumba por viles conjuradores nigromantes que no poseen otra habilidad propia que la de invocar a los muertos,
confundido y maravillado por la revelada verdad que se presentaba ante mis ojos
me di por muerto, y me quede paralizado frente a ese supuesto sendero que debía seguir.
caray, que confusión, ahora estoy muerto, cuando o como no tengo idea.
pero seguía siendo yo mismo, así que decidí afrontarlo y me puse de pie.
entonces los demonios y hechiceros me atacaron e indefenso me quedé.
entonces elevé mis plegarias al señor y le dije: ¡ayúdame señor!
¡estoy en esta especie de infierno!
pero recordé que no creo en cielo o infierno y que la realidad es solo una,
constante lucha de opuestos en eterno equilibrio
y continué caminando por el sendero que se supone debo seguir,
aunque temblaba de temor lograba ver a la distancia
grandes montañas y un sol resplandeciente entre las nubes.
y entonces escuché mi propia voz cayendo del cielo diciendo:
por favor perdóname, nuca quise lastimarte.
pero muy tarde era por que había tomado un nuevo sendero
que no se supone es el que debía seguir