Pasas por la puerta grande
me confundes con los olores
de orégano silvestre
y de jabón de pan.
Te doy pábulo por costumbre
y tus papilas me fastidian
con sus padeceres.
Pido a mares partir
sin rumbo
sin importar los platos sucios
ni tus pantalones.
me confundes con los olores
de orégano silvestre
y de jabón de pan.
Te doy pábulo por costumbre
y tus papilas me fastidian
con sus padeceres.
Pido a mares partir
sin rumbo
sin importar los platos sucios
ni tus pantalones.