¿Será el color quien condiciona la tragedia?

Sin depender del color de los ojos
Algo ocurre, se oscurece la mirada.

Pasando el tiempo y lejos de la tragedia,…

Un sol sale e ilumina
Sólo de vez en cuando

En la contienda conciente de la mixtura se enciende, el verbo la enlaza. El sol, dichoso sol al que puedes mirar, dichosa vos que detienes en él tus ojos. La tragedia está en las ruinas que dejaron todas y cada una de las despedidas. De vez en cuando dices, de vez en cuando. El sol, aparece y entonces es como si fuera una caricia que necesitabas tanto pero la vana terquedad hizo que olvidaras la noción de pájaro. De que se traen noticias de algún lugar, que acaso entre el cuenco y la vertiente hubo un interludio, que socavar nos es solo hundir las manos en la tierra o arañar la piedra, es irse camino del infierno sin paradas en las terminales. Y sin embargo se oscurece la mirada, por más clara que haya sido, por más color que dibujes sobre ellos. A las aves no les queda otra cosa que volar, algunas veces, solo algunas veces nos solemos detener. Dicen algunos que son visiones de una tierra prometida, de algún paraje que nos llenó de luz y dejamos el abismo y hasta florecemos y nos abrimos de par en par. Es el llamado, el antiguo llamado de los pares, que se juntan a contar nuestro eterno y largo viaje. A veces se producen malos entendidos, como en todo. Besos Ele.

el sol, dicen bien, desvanece las más oscuras sombras; como en un renacer... y todo es nuevo, impoluto y frágil otra vez

Ojos sin vida,
labios amoratados,
el cielo este día
se ha vestido de luto blanco.

El otoño nos enseña cómo vivir. Se lleva todo, hasta las hojas de la tragedia.

Sí Carlo.

A mi sí me gusta Oscurito!!!!!!!!!

>La tragedia, mija, es que te trajeras a la cosa esa gigantezca y amarilla y calenturienta cuando se imponía la melancolía y la nostalgia.

Chiquita, la tragedia es saber que los colores no son más que la envidia declarada por los dioses cursis a lo negro perfecto que impone la Nada. (Léase Nada como Dios primario)

Besote.
Ciao!

Oiga señorita, dónde consiguió Ud. tanto fino elucubrador, pensador, poeta, lector, escritor, ejercitador, amigo, camarada, loco...?

Un sol que tiñe de esperanza... etérea, desde las pestañas hasta el latido inquieto.

Muy bello, Ele!